A veces, vivir una vida plena implica poner proyectos e ilusiones en marcha.
Hoy te voy a explicar el truco que utilizo para esquivar el miedo y lanzarme a la aventura cuando me meto en campos que no conozco o en historias que no tengo ni idea de cómo van a acabar.
Es muy sencillo.
Consiste en empezar a hacer lo que sea, como si fuese una prueba.
Alguien dijo que no sería capaz de escribir una sola frase si no pensase que estaba haciendo un borrador personal.
Pues yo hago lo mismo, pero con la vida.
Me imagino que únicamente estoy probando. Eso me ayuda a rebajar la presión y las expectativas.
Cuando haces algo por primera vez, es inevitable sentir miedo o vergüenza. Es la manera que tiene tu subconsciente de avisarte de que te puedes estar metiendo en un lío.
Por eso, una vez que he escuchado todas las advertencias de mi Pepito grillo particular, calmo mi inseguridad diciéndome a mi misma: «De momento, voy a probar».
Así me lie con el huerto, así me puse a escribir el libro, y así monté mi web.
Si te hace ilusión empezar una nueva aventura, pero el miedo te impide avanzar, prueba a imaginarte que estás haciendo sólo un experimento. A ver qué pasa.
¡Que tengas un fantástico lunes!
